Punto de vista de Seraphina
Rosie estaba haciendo buenas migas con un chico del bar, y aunque me hubiera molestado que me abandonara, al menos Kit era buena compañía. Para ser sincero, casi me había olvidado de ella. De vez en cuando Rosie se acercaba a la mesa para ver cómo estábamos.
Aunque no dejaba de mirar con ojos de alcoba a uno de los amigos de Kit, al menos me tranquilizaba saber que también me vigilaba a mí. Kit y yo debimos de hablar durante varias horas, sin que se nos acabaran las cosas de las que hablar.
Divertidas bromas de un lado a otro mientras él me hacía reír y yo se lo devolvía.
"Oye, hay algo que quiero preguntarte", empecé. "Y puedes decir que no."
Kit se había pasado al agua hacía una hora, al parecer le gustaba la sensación de tener algo que beber a sorbos. "No diré que no. ¿Qué quieres preguntar?"