*Simon's POV*
Tras dejar a Alice, me dirigí tímidamente al despacho del Rey Alfa. Ya había pasado suficiente tiempo para que atendieran a Olivia y yo necesitaba respuestas, no sólo de él, sino de todos.
Los humanos y los pícaros mutados estaban conectados, y tenía la sensación de que el Rey Alfa sabía por qué.
Me acerqué a la puerta de su despacho y respiré hondo antes de llamar.
"Entra", oí retumbar su voz a través de la puerta cerrada. Me recompuse antes de girar el picaporte y empujarla para abrirla.
"Su Majestad", comencé. "Usted eligió reunirse conmigo después de curar las heridas de Olivia. ¿Cómo está ella?"
Lo pregunté sólo por cortesía. En realidad no me importaba.
Me miró desde los papeles que tenía en las manos. "Ah, sí. Simon. Por favor, tome asiento. Ella está bien, gracias. Realmente salvaste el día".