Punto de vista de Ayda
Cuando desperté, todavía estaba oscuro, al igual que mis pensamientos.
Si las cosas hubieran sido diferentes...
Si las cosas hubieran sido diferentes, si las cosas hubieran funcionado como en las historias, entonces habría estado con Sebastián esa noche en Twilight Tavern y no con su hermano. Habría sido Sebastián a quien le habría dado mi virginidad y no… no a su hermano. Mancillado. Un momento de profunda lujuria y nada más.
Si las cosas hubieran sido diferentes, perfectas, Alex aún podría haber vivido para casarse con Narcissa, dejando a Sebastián capaz de desposarse conmigo. A nadie le habría importado mientras el Príncipe Dorado siguiera vivo.
Sebastián bostezó, con la cabeza apoyada en sus nudillos inclinándose sobre mí sobre sus sábanas. Sábanas, rojas como la sangre como la visión que perseguía mi sueño, y emití un sonido como el de un cordero herido.
