Olas y olas de energía espiritual surgían en este dominio estelar.
Pedro Brown no podía hacer más que ocasionalmente usar su Sentido Divino para examinar la situación exterior.
La situación detectada por su Sentido Divino conmocionó a Pedro, ya que todos los buques de guerra habían sido destruidos, y ninguno de los cultivadores a bordo había sobrevivido, todos pulverizados por la masiva erupción de energía.
Cuando volvió a mirar a Marte, Pedro descubrió que el Heavenly Dao había emergido sobre Marte, y se estaba formando una nueva atmósfera.
—¡Su formación había tenido éxito! —exclamó con alegría.
Tras ver la situación en Marte, Pedro se sintió un poco aliviado. Sin embargo, sabía en su corazón que esto podría ser solo una oportunidad que estaba dejando para Marte, y él no sería capaz de disfrutar ningún beneficio de ello.
Cuando quería maldecir a alguien, Pedro ni siquiera sabía a quién culpar.