La Aldea Flower Creek no había estado tan animada en muchos años. Viendo una tras otra máquina entrando al pueblo y luego llegando a la colina árida contratada por Peter Brown, todos se agachaban y miraban cuando no tenían nada que hacer.
—¡Es realmente increíble lo que le está pasando a la familia Brown! —exclamó alguien del pueblo.
—Por supuesto, ¡nunca pensé que Peter conocería a tanta gente con conocimientos en la prisión y aprendería tanto! —comentó otro vecino con sorpresa.
Mientras todos discutían la prosperidad de la familia Brown, especulaban sobre qué estaría planeando construir Peter.
Para ese entonces, Peter ya había regresado al pueblo. Los subordinados de Daniel Pangbourne eran bastante eficientes, y al día siguiente, habían preparado un plano y enviado varios planes de renovación a Peter.
Mirando el diseño en el plano, Peter no tuvo comentarios, así que inmediatamente llamó a Daniel Pangbourne y le pidió que organizara al personal para comenzar el trabajo.
