Mientras la formación se elevaba, una frialdad surgió desde el fondo del corazón de Pedro. Incluso con sus habilidades de cultivo, Pedro sintió instantáneamente el frío destructivo que emanaba de la formación.
—¡No es bueno!
Pedro sintió que apenas podía resistir el frío, y si su Qi Verdadero se veía obligado a movilizarse más para prevenir la invasión del frío, el Talismán de Invisibilidad perdería naturalmente su efecto.
Justo cuando Pedro quería retirarse, de repente, descubrió con agradable sorpresa que el Árbol Dorado emitía una luz dorada y barría todo el frío de su cuerpo.
—¡El árbol de mérito tiene tal habilidad!
Esto ocurrió en un instante, y no hubo movimiento por parte de Pedro, quien estaba allí parado.
Los dos nacionales Árticos pensaron que la formación revelaría a las personas una vez activada. Sin embargo, para su sorpresa, la formación fue activada, pero nadie apareció.
—¿Lo vimos mal? —dijo uno.