Pedro Brown también estaba feliz de ver a su familia emocionada.
—Perfora diez metros hacia abajo desde aquí.
Pedro señaló un lugar y habló al personal de construcción.
—Sr. Brown, usted ya ha perforado más de sesenta de estos agujeros. ¿Para qué son? —preguntó un trabajador con curiosidad.
—Oye, no lo sé. De todos modos, los libros dicen que perforar agujeros así liberará espíritus malignos y luego vendrá la buena suerte.
Pedro bromeó, pero no dijo la verdad. Esta vez, Pedro estaba instalando una Formación de Reunión de Espíritus de 72 Agujeros, que no era una Matriz de Reunión Espiritual ordinaria. Cuando la formación estuviera montada, no solo la energía espiritual de aquí se quedaría atrapada, sino que también se absorbería la energía espiritual externa.