—Tristan Sinclair, tú —Jack estaba simplemente impactado por este giro inesperado de los acontecimientos. ¿Cómo es que este hombre nunca entregó los papeles de divorcio?
—¿Sabes Jack? Ella se había ido cuando me di cuenta de que empezaba a enamorarme de ella. Desapareció de mi vida, y no tuve la oportunidad de disculparme con ella y expresar mis verdaderos sentimientos —Tristan tomó otra profunda respiración antes de continuar con sus palabras.
—Y ahora, cuando ella ha regresado, quiero perseguirla de nuevo. Quiero —su voz se desvaneció cuando vio a Jack levantar la mano para detenerlo.
—Tristan Sinclair, ¿por qué me estás contando esto? Si amas a Bella, ¡deberías decírselo a ella, no a mí! —Jack se sentía extraño escuchando la confesión de Tristan.
—Si no le cuentas sobre tus sentimientos, Bella nunca lo sabrá porque no puede leer tu mente —miró fijamente a este hombre tonto.
—Tristan... —Tristan quedó en silencio, perplejo.