En Mogul Mega Mall, en el estacionamiento subterráneo,
Dylan estaba sentado detrás del volante de una lujosa camioneta Mercedes negra, luciendo aburrido. Al mismo tiempo, Max, sentado a su lado, ocupado escribiendo en su portátil, parecía ajeno al aburrimiento de Dylan.
Había pasado una hora y Tristan no había dado ninguna instrucción. Cada vez más agitado, Dylan se pregunta si Tristan los ha olvidado para una acogedora cena con su exesposa.
Al mirar a Max, Dylan rompe el silencio. —¿Hombre, terminaste la clara imagen del jefe?
—Lo hice —respondió Max distraídamente, sus dedos bailando sobre el teclado, su atención dividida entre Dylan y un acalorado intercambio con su compañero de juegos en línea.
[X4D] ¿Quieres jugar?
[Café_Amargo] No, hombre. Estoy de servicio.
[X4D] ¿En serio? ¡Es viernes por la noche! ¡Nadie trabaja los viernes por la noche!
[X4D] Solo un juego, vamos.
[X4D] Me estoy muriendo de aburrimiento esperando aquí.
