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—Son dos niños —ella respondió felizmente.
Qiao Ning se sobresaltó de alegría —¡Son gemelos! Eso es realmente grandioso, Xiaotang, eres increíble. ¡El señor Dongfang debe estar emocionado, verdad?.
La sonrisa de Hai Xiaotang titubeó por un momento —Sí, toda nuestra familia está muy feliz.
Excepto Dongfang Yu…
Porque él ni siquiera sabía que estaba embarazada.
Ella tampoco sabía dónde estaba él. Desde que Dongfang Yu perdió el contacto, no había tenido más noticias de él.
Hai Xiaotang se negaba a creer que él simplemente desaparecería, o cortaría voluntariamente la comunicación con ella.
No era una tonta. Su intuición le decía que algo podría haber sucedido de lo que no estaba al tanto.
Pero todos en casa actuaban con normalidad; nadie parecía preocupado por la desaparición de Dongfang Yu...
Por lo que no se atrevía a pensar en las peores posibilidades.
