—Sí, todo es culpa del abuelo —Hai Zhiyuan asintió pesadamente.
—¡No, no lo creo! —Hai Xiaotang sacudió la cabeza—. Abuelo, ciertamente no fuiste tú quien lo hizo, debe haber alguna verdad oculta, ¿verdad?
—Ah, el abuelo también puede cometer errores. Pero cuando me di cuenta de mi error, ya era demasiado tarde.
Hai Xiaotang quedó conmocionada.
¿Realmente lo hizo el abuelo...
—Xiaotang, sabía que llegaría este día. He estado huyendo toda mi vida, pero ahora es el momento de enfrentarlo. No culpes a Ayu, de hecho, soy yo quien les hizo daño —dijo el abuelo.
—Abuelo, todavía no creo... —Hai Xiaotang dijo tristemente—. Eres tan bueno, ¿cómo podrías hacer daño a otros? ¡No lo creo! Debes admitirlo a propósito para salvarme.
—Sí, abuelo lo admitió para salvarte, pero esa es la verdad después de todo —asintió Hai Zhiyuan.
Hai Xiaotang abrió mucho los ojos —¿Cómo es eso posible...?
—Y, el abuelo se entregó. Es el abuelo quien te debe una disculpa por arrastrarte a este sufrimiento.
