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Al ver llegar a la policía y agacharse en el suelo, Lana Thompson, quien se sintió avergonzada, de repente se tensó.
Pensó que el susto anterior había sido su castigo, pero ¿por qué llamaron a la policía?
¿Iban a hacerla legalmente responsable?
Lana entró en pánico y buscó ayuda de Ava White.
Ava le dio un casi imperceptible movimiento de cabeza, indicándole que no se asustara.
Ella ya había pedido a alguien que borrara el video de vigilancia, así que aunque viniera la policía, no podrían averiguar nada...
Muchas personas tocaron el proyector hoy, sería imposible determinar quién fue basándose en las huellas dactilares.
Por lo tanto, incluso si la policía venía, este caso estaba destinado a ser irresoluble.
Lana respiró aliviada y lentamente se levantó del suelo. Su vestido estaba mojado por debajo, pegándose a sus piernas, recordándole lo que acababa de suceder.
Las personas a su alrededor se alejaron de ella, como si fuera un virus...