El dolor agudo en su muñeca hizo que Skay se diera cuenta de que este tipo era despiadado. Dejando todo lo demás a un lado por el momento, salvar su propia mano era lo más importante.
Al oír eso, Anthony Charlie señaló a Eve y dijo lentamente:
—Pide disculpas a ella.
Eve se quedó atónita.
Su voz era muy profunda, y su tono era indiferente. Sin embargo, llevaba una presencia autoritaria que hacía que la gente no se atreviera a rechazar.
Las emociones de Eve de repente se volvieron complicadas. La sensación de estar protegida y defendida llenó su corazón...
Pero Skay se sorprendió, gritando en inglés:
—¿Por qué debería pedirle disculpas? ¡Ella fue la que tiró la comida sobre mí primero y lo empezó todo!
Antes de que pudiera terminar, Anthony aplicó más fuerza a su agarre.
Skay gritó de dolor:
—¡Siento que me voy a morir! Suelta, ¡y le pediré disculpas a ella!
Anthony no soltó. Un hombre de pocas palabras, simplemente explicó:
—Acabas de decir 'joder' hacia ella.
Skay: ...