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Este asunto había manchado su reputación, de hecho, podría entablar un proceso y demandar a las partes involucradas.
Sin embargo, cuando pensó en la chica que había venido a él a lamentarse esa mañana, bajó la mirada.
Ahora solo podía tomar el asunto en sus propias manos.
Si Shi Nianyao pudiera escribir un artículo para aclarar lo que había pasado en realidad, entonces este asunto quedaría resuelto.
Shi Nianyao agitó sus manos inmediatamente. —No es ninguna molestia. Fui yo quien desencadenó el incidente, así que yo... yo encontraré la manera de resolverlo.
Mo Xicheng asintió y luego tomó su celular para llamar a su gerente.
Ambos no sabían qué decirse el uno al otro mientras esperaban al gerente.
Cuando Shi Nianyao todavía lo miraba de una manera tonta, Mo Xicheng dijo:
—¿No tienes que ir a trabajar?
Levantó la muñeca para mirar la hora. —Ya son las nueve y media.
—¿Ah? —Shi Nianyao se golpeó la cabeza—. ¡Ay, Dios mío, estoy frita! ¡Llego tarde!
