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Chapter 3 - Los milagros no siempre son buenos

La pelea de Asmael y el comandante Albert fue interrumpida por Rafael que hizo sonar una campana que yacía en sus manos.

—Rafael, ¿De donde sacaste esa maldita campana?—Dijo Raquel con una cara fuera de contexto.

—Esta cosa la encontré husmeando por todos estos papeles desordenados tratando de buscar un arma.—Dijo Rafael con sinceridad.

—Y-Ya veo—Dijo Raquel nuevamente con una cara fuera de contexto.

Inmediatamente toda la sala tuvo un silencio largo, profundo he incómodo. Hasta que Albert atónito por lo sarcástico que se estaban tomando esto, Exclamó:

—¡Bastardos! ¡Están consciente que los puedo matar si yo lo quiero!—Albert ignorando a Asmael se dirigió en un parpadeo a Rafael agarrandolo del cuello y poniendo una pierna detrás de las piernas de Rafael tumbando con gran fuerza al piso.

*crack*

—¡Aaargh!—los ojos de Rafael se comenzaron a nublar inmediatamente tocó el suelo.

—¿¡Lo ven!?, ¡Cuando quiera!.—Exclamó Albert burlándose de Rafael que yace en el suelo inconsciente.

—¡Rafael!—gritaron Raquel y Asmael al unísono.

—¿eh?, ¿Que?... ¡Rafael!—exclamó Dennis dándose cuenta demasiado tarde del estado de Rafael.

Polvo y pequeños pedazos de Madera yacían en el ambiente de la cabina principal por el derribe de Albert.

Albert se dirigió hacía Raquel y Dennis que estaban realmente asustados.

—¡Nos vamos a morir!, ¡Aaah!—Gritaron Dennis y Raquel al unísono,

—Detente ahí Albert—Dijo Asmael colocándose en medio del camino de Albert.

—Debo admitir que eres bueno peleando, me rompiste unos cuantos huesos pero nada más.

—¿Nada... más?—Dijeron Raquel y Dennis al unísono asustados por aquel monstruo que por romperle unos cuantos huesos no era gran cosa.

—Y eso que aun no demostré mis demás estilos—Dijo Asmael colocándose en una posición de algo que parece ser... ¿Un mono?.

Asmael adoptó una variación del estilo del mono. El mono de madera: Esta variación del estilo del mono representa a un mono serio, furioso que ataca y defiende con ferocidad. La actitud de este mono es más seria, y sus movimientos son notablemente menos ligeros que los de los otros monos por que la hace lenta pero muy fuerte y por la destreza que tiene Asmael con las artes marciales su velocidad no se disminuye tanto. A esta variación le gusta luchar cuerpo a cuerpo y tirar al oponente al suelo. Y una vez que te ha tirado...

—¡Ha ha ha!, ¡Que pose para más ridícula!.

—Pues ven y confirmalo.

—Si tanto insistes, ¡Aqui voy! *fium*

Estas perdido.

Cuando Albert estaba lo suficientemente cerca de Asmael, este mismo en menos de 2 segundos ya había golpeado 3 puntos de presión entre su abdomen y pecho, lo que hizo retroceder a Albert.

—Es tu turno Rafael.—Dijo Asmael.

—¿¡Que!?, ¡Pero si estabas en el piso hace rato!

—Yo también pensaba lo mismo.—Dijo Rafael.

En el momento en que Albert tumbó a Rafael contra el piso, Rafael en si cayó inconsciente, pero cayó inconsciente por cuenta propia sin recibir demasiado daño gracias al intenso entrenamiento que recibió de parte de Asmael y su gran disciplina, constancia y perseverancia por querer ser fuerte. Lo cual nos lleva a esta situación, Rafael despertó segundos después de que Albert lo haya tumbado esperando el momento exacto para lanzar un ataque crítico.

Entonces Rafael con todas sus fuerzas dirigió un codazo a la parte trasera de la cabeza de Albert.

—¡Aaargh!—Grito Albert antes de caer al suelo con el cráneo resquebrajado.

Lo que aprovechó Asmael para voltear a Albert y conectarle varios golpes en la cara y el abdomen. Esto dejó fuera de combate a Albert que yacía en el piso inconsciente.

Un corto silencio se apoderó de la cabina principal mientras que se escuchaba la sangre de Albert goteando.

—¡wow!, ¿es enserió?—Dijo un Raquel un atónita y asqueada por como quedó la cara de Albert.

—Fue difícil, pero se logró.—Dijo Rafael con una sonrisa victoriosa.

—Rafael, lo único que hiciste fue desmayarte y sorprender a Albert, nada más.—Dijo Asmael mirando con suspicacia a Rafael.

—Yo opino... tienes razón no hice mucho.—Dijo Rafael con tristeza mientras se ponía en posición delante del cuerpo de Albert.

—ánimo, ánimo almenos peleaste con mucha gallardía, no como Asmael que se creía superior a ese monstruo.

—Dijo Raquel consolando a Rafael y culpabilizando a Asmael.

—Un verdadero artista marcial no debe de sucumbir ante la adrenalina o alguna otra emoción durante una pelea, una pelea es una lucha de valores, no una contienda normalizada. —Dijo Asmael poniendo un dedo al lado de su cabeza.

—Con que así es el pensar de un profesional.—Dijo Raquel sujetándose la barbilla con sus dedos.

—Yo diría de un Chiquillo.—Dijo Rafael burlándose de las creencias de Asmael.

—Piensen lo que quieran—Dijo Asmael ignorando a estos dos.

—Ahora que lo pienso, ¿Cómo se llama esa manera de pelear que utilizó Albert con su cuchillo?.—preguntó Raquel.

—Si mal no recuerdo, se llamaba bakom—Dijo Asmael un poco incrédulo de su respuesta.

El Bakon es un Arte marcial o estilo de pelea, como lo quieran llamar, que fue creada en tierras peruanas por la década de 1980 por el excomandante del ejército peruano y también luchador callejero, Roberto Puch Bezada. Este arte marcial se popularizó a través de libros y canales de televisión por aquel entonces nombrado como "El único arte marcial peruano". El bakom es una combinación de todas las técnicas de combate callejero, muy populares en enfrentamientos de una Lima de antaño, donde se hacian duelos por el honor y la gloria. El objetivo principal es el de saber cuándo atacar con energía para perturbar el equilibrio del oponente. Llaves contra los brazos y el cuello son de uso común como también lo es usar armas blancas.

—¿Bakom? Nunca escuche hablar de eso—Dijo Raquel agitando su cabeza de derecha a izquierda.

—A juzgar por cómo atacaba Albert, puedo decir que era un profesional en ese arte, no solo por su fuerza bestial sino también por su técnica.—Dijo Asmael sorprendido.

—¿Entonces como le pudiste hacer frente?—Dijo Dennis dudoso.

—yo soy un profesional en varias Artes marciales, el solo era un luchador que dependía de su descomunal fuerza bruta y ese artes marcial. Entonces todas esas personas a las que mató eran civiles ordinarios sin ningún conocimiento sobre las artes mar‐—Dijo Asmael dándose flores a el mismo cuando es interrumpido por Raquel.

—"Rafael casi te escucha"—Dijo Raquel tapándole la boca a Asmael.

—¿Que yo que?—preguntó Rafael mientras buscaba más cosas interesantes en los restos de la cabina principal.

De entre los fallecidos de ese día, se encontraba la madre de Rafael Orsafhus que fue masacrado brutalmente por Albert.

—No, nada, sigue en lo tuyo.—Dijo Asmael persuadiendo a Rafael.

—Okey

—¡Listo!, vencí a esta chatarra.—Dijo Dennis contento

por haber desbloqueado el transmisor.

—Muy bien, ahora solo queda enviar el mensaje al cuartel estadounidense.—Dijo Raquel quitandole el transmisor a Dennis de sus manos.

—¡Victoria!—Dijeron todos al unísono menos Asmael que estaba dando un pequeño descanso a un lado.

La misión estaba casi completa, pero había un pequeño inconveniente.

—¿Como se usa esta cosa?, tiene demasiados botones.—Dijo Raquel cortando la celebración.

—Trae para acá, que yo lo hago—Dijo Dennis con una sonrisa.

Unos segundos después...

—Ya está, solo queda activar el audio para que los del otro lado nos escuchen.—Dijo Dennis orgulloso de sí mismo por su hazaña.

—No hiciste mucho, ¿Por que estas tan orgulloso?—Dijo Raquel fríamente.

—¡Oye! ¡Raquel, todo este tiempo estabas atrás de todo como si de una perezosa se tratara!—Dijo Dennis clavando un cuchillo de verdades en el pecho de Raquel.

—¡No!, ¡No lo digas!, ¡Así no!—Gritó Raquel dando vueltas en el piso retorciéndose de dolor por lo que escuchó.

¿Por qué tanto escándalo?

Apareció aquella persona con traje que parecía ser la que tenía el control del comandante Albert, Pero...

—¡Mi orgullo como mujer no puede aceptar tales hechos, además!, ¿No sé deberían de sentir honrados por defender a una mujer tan linda como lo soy yo?—Dijo Raquel alardeando por primera vez de su belleza.

—¡Si eres una mujer linda, actúa como tal!, ¡Pareces una maldita de esas tantas mujeres que se creen superiores solo por ser lindas, pero eso no les suma derechos y se aprovechan de sus privilegios!—Dijo Atacando con una verdad irrefutable.

Oigan-

—¡Maldito exhibicionista!—Gritó Raquel a la vez que se lanzaba a Dannis para atacarlo

—¡puta loca!—Grito Dennis con las mismas intenciones.

Pero que carajos pasa aquí.

La discusión y los gritos de Raquel y Dennis opacaron la aparición de aquella persona.

Mientras que Raquel y Dennis estaban discutiendo, Rafael los estaba separando como si fuera la pelea de un perro y un gato.

—Oigan, ya calmense por favor.—Dijo Rafael mientras recibía algunos golpes de estos 2.

¡Ya fue suficiente!

Aquella persona sacó un bastón de madera con una forma extraña que parecía que le salían raíces y lo azotó contra el suelo.

—¿eh?—Dijeron todos al unísono.

El bastón dejaba a su paso grietas que brillaban de color verde, y se dirigían hacia Albert.

Estas grietas una vez tocaron el cuerpo de Albert, se empezó a elevar y a regenerar las lesiones y heridas que este tenía junto a la sangre perdida que regresaba a su cuerpo.

—Pero que es eso, algún tipo de... ¿magia?—Dijo Dennis polvoriento.

Todos se quedaron atónitos por lo que estaban presenciando. ¿Es que acaso estaban presenciando Magia?

—Q-Que esta pasando. —Dijo Albert que acaba de recuperar el conocimiento.

Parece que se te complicó un poco, ¿no es así, Albert?

—¡Mi señor!, lo siento por no haberme encargado de estas alimañas, en verdad, si me permite otra oportunidad...—Dijo Albert cuando cayó al suelo después de que las grietas dejaron de brillar.

Te voy a dar otra oportunidad, esta vez quiero que te dejes de juegos.

—Si mi señor.

—Ese sujeto acaba de curar a Albert con un bastón extraño. Esto se sale de cualquier razonamiento logico, ¡Esto es anormal!.—Exclamó Rafael anonadado.

—¿Segundo asaltó? Esto se pone interesante.—Dijo Asmael parándose rápidamente para realizar movimientos de calentamiento.

—Este mentecato ya olvidó lo que dijo, además acaba de pasar algo totalmente inhumano y este está como si nada—Susurró Rafael.

—Esta vez voy a ir enserió, así que no se mueran.—Dijo Albert poniéndose en pose de carrera.

—¡Rafael!

—¡Si!

Ambos y los únicos que están disponibles para hacer frente a este monstruo están preparados, ¿Acaso Albert se estaba conteniendo anteriormente?.

—Ese Hombre...

Raquel tiene un ataque de pánico al recordar quien es aquella persona que acaba de restaurar a Albert.

—Ese hombre, es El presidente Rogerd MountBlack.

El presidente Rogerd MountBlack, ¿Quién será esta persona que tiene aterrada a Raquel?