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Chapter 5 - VENDETTA EN LA PRISIÓN

Hola me llamo Matías y les voy a contar mi historia, tengo 25 años soy de una ciudad de Italia es curioso como la vida puede dar un vuelco de 180 grados totalmente, pues eso me paso a mí, soy un trabajador normal y corriente nunca me me gustó mucho el deporte solo práctico por salud lo necesario para no estropearme.

Bien como cualquier otro día salí a hacer mi rutina diaria de correr, cuando me vi envuelto en una situación algo complicada, me encontré con un excompañero de colegio aunque él me caía mal, ademas lo vi algo sospechoso, pero para no hacerla de malo le hable de todos modos y lo salude, ese fue el peor error que cometí en mi vida, ya que él estaba envuelto en grandes problemas, justo estaba escapando de un crimen que había cometido claro que yo no tenía idea, para despistar a la policía él se puso a conversar conmigo, pero la policía llego llevándoselo a él y ha mí también confundiéndome con su compinche, de nada ayudo que el miserable me hablara como amigo y envés de aclarar el malentendido me hundió más, este compañero no era una persona agradable, ya que ni en el colegio le hablaba mucho era el típico Bullying del colegio intimidando a todos, es más yo era su víctima, pero bueno, hay iba yo a la cárcel junto a él hasta que se demostrara mi inocencia, para mi mala suerte me pusieron en la misma prisión que este excompañero una molestia total.

Pasaban los días y no veía resultados en la audiencia sobre mi caso, lastimosamente este compañero no había dejado sus malos comportamientos, en la prisión se dedicó a atormentar a los más débiles incluyéndome, luego de haberme metido en un problema sin razón todavía tenía el descaro de dirigirme la palabra el muy hijo de puta, pero yo soy débil no tengo oportunidad contra alguien más fornido que yo, pasaban los días y luego meses, perdi la esperanza me había dado 15 años por algo que yo no había hecho, ademas el tormento diario tenía que aguantarlo, a veces terminaba en el suelo golpeado por este mismo compañero y me repetía que no me quejara más que no tuvo más opción para aminorar el crimen, ya que a él le dieron 20 años de lo cual al principio estaba programado para 50 porque era reiterativo, yo pague los platos rotos no me gustaba esta situación.

Ya han pasado 1 año y sigo aquí maltratado, mi esposa me abandono no me creyó que era un malentendido después de todo lo vivido es una lástima, tiempo después me entere de que me engaño antes de terminar conmigo, luego me echaron del trabajo, ni bien paso el primer mes, no esperaron más mi inocencia como cualquier empresa que no piensa en sus trabajadores, al menos con mi dizque esposa no tuvimos hijos, si no la pasaría peor, pero bueno sigamos.

Un día como cualquiera recibiendo mi paliza diaria, ya estaba acostumbrado, me llevaron a la enfermería y en un descuido del guardia y la enfermera logre apropiarme de un frasco de calmantes escondiéndolo con cuidado entre mis mangas, esa noche ya no quería vivir más así que tome todo el frasco de calmantes y para mi sorpresa yo que nunca me enferme por mi vida sana resulto que soy alérgico a esa clase de calmantes que tenían en la prisión, quería una muerte tranquila, pero envés de descansar tranquilo empece a hincharme y convulsionar despertando a mi compañero de celda el cual no era tan malo como los otros y rápidamente aviso a los guardias, no recuerdo exactamente lo que paso, solo recuerdo hasta cuando los guardias entraron a mi celda tratando de levantarme de repente todo estaba negro solo veía pasar mi vida delante de mí, así que era verdad lo que decían, me vi a mí de niño de adolescente y de grande, si se puede decir así, ya que no soy tan viejo, pero era curioso no llegue a hacer nada en la vida solo era una persona corriente del montón, me puse a analizar mi vida no logre nada, no tuve nada, no deje descendencia y me preguntaba por qué, una ira empezó a cubrirme una aura negra empezo a salir de mí rodeando todo mi cuerpo y constantemente repetía porque, porque, de quien es la maldita culpa, después de un pequeño lapso de tiempo escuchaba una risa y me parecía conocida, en ese instante apareció una pantalla en frente de mí y la cara de mi excompañero riéndose enfrente mío, una mirada siniestra se apoderó de mí y dije, tú eres el culpable de todas mis desgracias tirando un puñete a esa pantalla que se rompió y también algo en mí se había roto.

Desperté en una cama de hospital esposada a ella y un guardia a mi lado me dijo, que era un idiota por a ver echo eso que gracias a mí había despedido a varios guardias por no darse cuenta de lo que me había llevado, ahora mi estadía en prisión iba a hacer más dolorosa porque los guardias si no me ayudaban antes ahora iba a hacer peor, solo lo mire fijamente y note como el guardia estaba un poco incomodo tras darle una mirada, parece que mi mirada había cambiado en su totalidad, solo le respondí al guardia que espero con ansias regresar, el guardia un poco temeroso solo me dijo, que una vez que vuelvas estaria en la celda de castigo unos 4 meses, no saldría para nada, un pequeño cuarto donde no me verá nadie es perfecto para empezar mi venganza.

En el hospital pase 1 mes recuperándome en ese entonces conocí a una enfermera que me veía a diario, entable una agradable conversación con ella le conté mis problemas y ella comprensivamente me creyó me dijo que alguien tan amable como yo no podía ser una mala persona, también me dijo que a veces hay que defenderse de otras personas, que no siempre las personas aprenden a palabras es necesario defenderse en este cochino mundo, ella me dio la inspiración para seguir mi plan, ella me alimentaba bien así que llegare a la prisión con unos kilitos de más, era perfecto para lo que vendría, después me encerraron en la celda de castigo como estaba planeado, en el camino logre ver a mi excompañero y él solo me vio y sonrio, yo luego le devolví la sonrisa, eso lo molesto, pero no podía hacer nada me estaban llevando a la celda de castigo el mismo guardia que me estaba cuidando en el hospital fue el que me encerró y me dijo, << Yo sé que tú no lo hicisteis eres una persona decente así que trataré de ayudarte en lo que pueda >>, lo mire y le dije << si es verdad lo que dices, ayúdame en algo por favor, si resulta esto no solo lograré mi venganza también ayudaré a mantener a raya esta prisión >>, el guardia me miro sorprendido y luego de pensarlo unos momentos me respondió, << ¿qué es lo que deseas? >>, le hable de mi plan y me dijo que estaba de acuerdo.

Todos los días él me traia algo extra de comida para sobrevivir mejor y también me trajo unos libros de artes marciales como karate, muay thai, y boxeo, desde ese momento todos los días empecé a entrenar sin descanso pensando en el bastardo ese que me había hecho tanto daño, la enfermera que se preocupó por mí y el guardia que me dio una oportunidad me dieron inspiracion para seguir, el mismo guardia era el que venía a dejarme la comida, ya que parece que él tenía un cargo superior en la prisión y podía hacer lo que quería, parece que el cielo no me ha abandonado todavía, así pasaron los días, meses y entrene como loco mis artes marciales, golpeaba todos los días un lado del cuarto para poder aumentar la dureza de mis manos, planchas, abdominales, me colgaba de pies en la pequeña ventana de mi celda y hacia abdominales de cabeza, un sin fin de ejercicios, me podía mantener bien por el guardia, ya que me alimentaba bien lo considerado un gran amigo, no era alguien muy sonriente que dirían, pero se dejaba entender y así pasaron los meses y mi sentencia en la celda de castigo se había terminado como les dije al principio nunca fui muy fan del ejercicio, pero ahora era otra cosa muy distinta logre ganar mucha masa muscular en 4 meses, yo mido 1.80 y era flaco, pero ahora estoy muy fornido casi ni me reconozco, el pelo me creció mucho me lo amarré como una cola de caballo.

El día había llegado era un día cualquiera todos estaban en el patio de recreo hablando, peleando, divirtiéndose cuando yo entre, todos me quedaron mirando no era el mismo de siempre, yo avance hasta una banca y me senté, el patio estaba en silencio mirándome, el bivirí que tenía era muy entallado por mis músculos, hasta que uno dijo a su compañero << ¡hey! Jugamos ¿qué pasó? >>, y volvió la normalidad en el campo, solo me puse a leer un libro que tenía de karate en la mano cuando el maldito que estaba esperando se me acerco y burlonamente me pregunto, si era Matías, lo cual cerré mi libro y me levante y me puse cara a cara con él, él mide un poco menos que yo 1.75 para ser exactos me veía muy intimidante frente a él, él tenía músculos también, pero no se comparaban con los míos parece que yo fui bendecido genéticamente solo me basto 4 meses para tener una gran musculatura y claro los ejercicios constantes ayudaron, le contesté, que sí, era yo y muy arrogantemente le pregunte, ¿Qué quería? Tenía unas ganas de tirarle un puñete, pero tenía que esperar, si lo voy a hacer tenía que hacerlo bien, tengo que hacerlo solo por defensa, tenía que provocarlo, él me miro y se rio, me dijo que ¿qué me paso?, hace poco era un debilucho, y luego puso una mirada seria diciéndome, << acaso solo por estar así ya le había perdido el respeto >>, el resto de compañeros se alejaron y nos dejaron a los dos solos rodeándonos y solo mire a los lados y le conteste, << parece que aparte de tonto eres lento >>, le dije también que se largara, él solo miro así abajo molesto cerrando los puños, yo lo miraba hacia abajo como si no fuera nada, y de repente me lanzó un puñetazo, eso era lo que esperaba que hiciera, le agarre el puño en plena ida y todos se quedaron sorprendidos, lo mire a los ojos y me acerque a su cara y le dije, << Nunca más vas a hacer nada malo en esta prisión > >, y procedí a darle una fuerte patada en el estómago usando una técnica de muay thai, estaba tirado en el suelo unos segundos, se levantó difícilmente y se quitó la camisa, yo me puse en una pose de defensa que nadie conoce, ya que todo este tiempo estado inventando mi propio estilo de pelea mezclando todo lo aprendido.

Comenzó la pelea todos rodeándonos en un círculo no dejaba de hablar puras bravuconerías, yo solo estaba concentrado en la pelea, el se me lanzo saltando, dando una patada en el aire, que decisión más estúpida, lo agarre de la pierna y el cuello en pleno aire y lo lanza con toda mi fuerza sobre el suelo se escuchó un horrible ruido como si cayera un saco de cemento de una gran altura, del horrible ruido que genero esa caída por la pelea, todos quedaron en silencio, él estaba tirado en el suelo casi desmayado sangrando por la cabeza y él con dificultad dijo, << Malditos que se quedan parados atáquenlo >>, fue entonces que se rompió el silencio, todos se me vinieron se lanzaron encima de mí, esquivaba sus golpes como si no fueran nada, golpeándolos en puntos vitales del cuerpo para dejarlos fuera de combate rápidamente, la pelea dura 5 minutos, al final solo me acerque al excompañero tirado en el suelo y le dije, < < Desde hoy mando yo maldito no te me vuelves a acercar >>, para terminar le tiré un puñete en todo el estómago dejándolo inconsciente en el patio, casi todos de los que estaban en el patio estaban tirados en el suelo, me sentí liberado y me pregunto ¿por qué los guardias no entraban a detenernos?, y me di cuenta de que en uno de los pisos superiores estaba el guardia que me ayudo mirándome y ha su costado estaban todos los guardias, estos malditos estaban apostando sobre mí solo me quedo reír jajaja.

Después de esta descomunal paliza que les di a todos estos malditos abusadores la prisión fue más tranquila nadie se metía conmigo y si había algún problema yo lo solucionaba, paso el tiempo y ya tenía 5 años en prisión y la prisión era un lugar soñado nadie abusaba de nadie y nos volvimos buenos amigos, implemente una clase de defensa personal y el excompañero nunca más se me acerco, el pobre término con un shock nervioso tras la pelea y nunca más fue el mismo, me siento mal por él, pero él sembró lo que cosecho, gracias al cielo el guardia que me ayudo lo ascendieron a alcalde de la prisión porque se descubrió algunas malas prácticas de parte del otro alcalde, cabe mencionar que yo ayude en algo jeje, nunca deje de entrenarme me volví fuerte para proteger y ayudar, ahora estoy a unos días de salir de aquí porque el alcalde actual ayudo en mi caso y gracias a que mi excompañero se volvió más dócil le sacamos la verdad, y al fin despues de tiempo sere libre.

Mi último encuentro con el guardia que me ayudo fue en las puertas de la prisión para salir, solo me dijo, << gracias por ayudarnos a mejorar este lugar >>, y se despidió de mí, ahora tenía otra oportunidad y ya que estaba en lo de los ejercicios me volvió boxeador y resulta que soy muy bueno, logre tener el cinturón mundial luego de varios años, ha es verdad la enfermera que conocí logre contactarme con ella ya hace tiempo y ahora tengo una familia con ella y 3 hijos, es curioso ahora estoy en el mismo sitio que al principio de esta historia saliendo a correr manteniéndome en forma ahora tengo 40 años y soy el campeón mundial de peso pesados, la vida me enseño que solo vasta que una persona crea en ti y eso es más que suficiente para poder seguir adelante, a veces no solo la esperanza de tener a alguien te puede salvar de la perdición, también a veces solo se trata de salir a delante por ti mismo y ver el valor de la vida y la venganza a veces no es mala si se toma como motivación, mírame a mí me resulto bien, espero que te haya gustado mi gran historia de vida te deseo lo mejor y suerte sobreviviente goza lo que tienes porque nunca sabrás si alguien del pasado lo cambiará todo, suerte.