—Michael, tú…
Tu Yilei frunció el ceño cuando escuchó lo que dijo Michael. —¿Qué tonterías estás diciendo? La estás asustando.
—¿Estoy diciendo tonterías? —Michael soltó una burla y lo miró fijamente—. ¿Cómo estoy diciendo tonterías? ¿Acaso no sabes cómo son tus fans? Cuando se vuelven locos, son capaces de inventar ancestros hasta la decimoctava generación.
—Le dije que se alejara de ti por su propio bien.
—Si piensas que hablé de más, no deberías haberle dicho todo esto a ella. Muy bien, no lo diré de nuevo.
Con eso, Michael giró la cabeza con la cara seria.
Tu Yilei frunció el ceño. —Michael, no es mi intención culparte.
—Eh, Sr. Tu… —Qiao Mianmian no pudo evitar sentirse un poco culpable al ver lo descontentos que estaban el uno con el otro—. Decidió irse rápidamente. —De hecho, creo que tu manager tiene razón. Lo hizo por mi bien y por el tuyo.
