—Ella estaba un poco molesta y terminó mordiendo con fuerza.
—Solo cuando saboreó sangre fue cuando abrió rápidamente la mandíbula.
—Miró hacia abajo y se llevó un susto.
—Había una marca profunda de mordedura en el dorso de la mano de Mo Yesi.
—Y estaba sangrando un poco.
—Qiao Mianmian estaba desconcertada. Agarró su mano cuidadosamente y dijo: "Yo-yo no lo hice a propósito. Lo siento mucho, ¿te duele mucho?"
—Mo Yesi miró hacia abajo a la chica cuyos ojos estaban llenos de preocupación y autoreproche. Su corazón se ablandó, y cuando volvió a hablar, lo hizo con una voz suave: "Amor, no llores, no duele".
—¿Cómo que no duele?—Qiao Mianmian levantó la vista con los ojos llorosos—. "Yo-yo te mordí hasta hacerte sangrar. Lo siento, realmente no quería hacerlo. Si realmente te duele, puedes... puedes morderte a mí".
—Qiao Mianmian en realidad tenía muy poca tolerancia al dolor.
—Pero en ese momento, estaba extendiendo su mano hacia él.