Su corazón latía desbocadamente contra su pecho.
Con una fuerza que amenazaba con abrir sus costillas.
Rápidamente colocó su mano sobre su pecho en un intento de calmarlo. Esta era la primera vez que tomaba la iniciativa de besar a un hombre.
Nunca se había atrevido a hacer algo tan osado.
Incluso cuando estaba con Su Ze, él había sido quien tomaba la iniciativa.
Ella misma no tenía idea de qué la había poseído en ese momento para hacer eso.
En retrospectiva, era realmente embarazoso.
Fue un momento en que el coraje y el impulso se encontraron.
Si pudiera retroceder en el tiempo, no creía que pudiera atreverse a besar a Mo Yesi otra vez.
...
Afuera del coche, Qiao Mianmian se estaba recuperando de la agitación.
Dentro del coche, el hombre que había sido besado estaba atónito.
Mo Yesi seguía en la misma posición, con la misma expresión. No se había movido ni un centímetro.
