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Con este comportamiento, Luo Xiu no lo persiguió. Retrocedió y se agachó para recoger los cabellos dispersos. Parecían un poco a los de un Dragon Li[1].
Alguien debía haber estado matando gatos en el callejón. No se sabía si tenía miedo o si quería atraparlos para comerlos, pero oyó a alguien y los lanzó afuera. Así, esto casi golpea al alcalde del condado.
Luo Xiu miró alrededor otra vez antes de volverse y regresar al lado de Lin Yuchen. Informó:
—Señor, no vimos a nadie. Debió haber escapado al final del callejón y saltar el muro. No hubo otras anormalidades. Había cabellos dispersos en el suelo, y parecían los de gatos.
Lin Yuchen miró profundamente el callejón. —¿Huyó tan rápido? Solo te detuviste un momento antes de mirar. ¿No lograste atraparlo?
Luo Xiu hizo una pausa y dijo:
—Creo que era un hombre joven, fuerte y ágil.