—¿Puedes repetir lo que acabas de decir? —dijo Thorin con una expresión seria en su rostro. Esta vez, el ambiente jovial a su alrededor se tornó pesado. Ya no estaba bromeando.
Por supuesto, a Amaya le gustaba más así, con un aire similar alrededor de ella, comenzó —Estamos interesados en hacer negocios con la Familia Oakenshield del Continente Enano. Nuestras condiciones son sencillas, y creemos que las encontrarán favorables.
—Estamos dispuestos a comprar todos sus productos al doble del precio de mercado. Sin embargo, una vez vendidos los productos, no se les permitirá rastrear su uso o preocuparse por su manejo posterior.
—Adicionalmente, solicitamos que nos presenten a otras Familias Enanas en las que confían, ya que apuntamos a expandir nuestro negocio en el futuro.
—Entendemos que la Familia Oakenshield tradicionalmente prefiere no firmar contratos, ya que valoran la confianza entre las partes al hacer negocios y sienten que un contrato disminuye dicho valor.
