—Ser una Jefa de Criadas del Palacio Real tiene sus propias ventajas. Dado que eres una jefa de criadas, no eres la sirvienta personal de nadie y no tienes que estar lista para servirles 24/7.
—Después de las 9 de la noche, la jefa de criadas está libre de sus deberes e incluso se le permite salir del Palacio Real.
—Por supuesto, al igual que Edda, la mayoría de las jefas de criadas en el pasado ya habían entregado su vida al Palacio y no tienen nada que hacer incluso después de que están liberadas de sus deberes.
—Por lo tanto, se quedan simplemente en la habitación que el Palacio les ha proporcionado.
—Hoy, sin embargo, fue diferente para la actual jefa de criadas del Palacio Real.
—Justo cuando terminó su trabajo, Edda salió apresuradamente y dejó el castillo.
—Caminando un poco más, llegó al sitio asignado y se le dibujó una gran sonrisa en el rostro cuando vio a la persona a quien había estado anhelando ver durante mucho tiempo de pie justo delante de ella.
