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Una mujer que salió de la nada de repente empujó el rostro de Aisha contra sus pechos y comenzó a acariciarle la cabeza. Como todo sucedió demasiado rápido, Aisha no pudo reaccionar a tiempo y se asustó.
Y ella no estaba sola, a Nux y sus esposas les pasó lo mismo.
Especialmente a Nux.
Nux todavía estaba utilizando su [Sentir] para escanear toda la mansión, sintió a muchos individuos poderosos, sin embargo, no pudo percibir a esta mujer en absoluto. Era como si hubiera aparecido de la nada.
—Finalmente has vuelto —la mujer habló y al oír su voz, Aisha, que aún estaba asustada, finalmente se calmó.
—H-Hermana, no p-puedo respirar… —ella luchaba.
La mujer se rió y entonces, finalmente la dejó ir.
—Me disculpo, me emocioné un poco demasiado, espero que me perdones, mi pequeña alborotadora.
—Yo no soy una alborotadora —Aisha hizo un puchero.
La mujer simplemente volvió a acariciar la cabeza de Aisha y se rió,