—¿Qué tal si te conviertes también en mi estudiante personal? —Eliyard preguntó con una pequeña sonrisa en su rostro.
—¿Eh? —Los ojos de Candice se abrieron de sorpresa cuando oyó a su profesor.
Ella no sabía que eso era lo que Eliyard estaba planeando cuando le pidió que lo llevara a Nux. Si lo hubiera sabido, habría tratado de cambiar el tema a otra cosa o habría inventado otra excusa.
De ninguna manera permitiría que Nux se convirtiera también en estudiante de Eliyard.
Su vida se volvería un infierno si viera su rostro más de 2 veces al día.
No solo Candice, sino incluso los estudiantes que escuchaban su conversación desde atrás también estaban impactados.
¡Ese era el Director!
¿Quién iba a pensar que el director vendría personalmente aquí para pedirle a Nux que se convirtiera en su estudiante? ¿Qué tan grande es esa oportunidad y honor?
Los estudiantes miraban a Nux con ojos llenos de reverencia y envidia.