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—¡AAAAGGHHHHHH!
Después de que la Niebla desapareció, un dolor punzante asaltó la mente de Nux y gritó de dolor.
—¡NUX!
Thyra había escuchado lo que les pasó a Dos y Tres, por lo que decidió caminar hacia el Terreno de Entrenamiento y ver qué estaba haciendo Nux.
Allí, vio esta enorme Niebla Negra que estaba esparcida por todo el lugar y decidió esperar.
Entonces la Niebla desapareció y una sonrisa apareció en la cara de Thyra.
—Je, vamos a sorprenderlo por detrás —pensó para sus adentros, sin embargo, pronto, escuchó su grito y corrió hacia él.
—¡NUX! —Thyra apareció cerca de Nux y le agarró las manos preocupada.
Sus ojos luego cayeron en la cara de Nux y eso la preocupó aún más.
La cara de Nux estaba pálida como el papel, las venas habían saltado en su cabeza mientras apretaba los dientes.
Era claro cuánto dolor estaba sintiendo, sin embargo, como Thyra estaba ahí, se controló y no gritó más.
