15 minutos después.
—¡Jajaja! Debí haberlo esperado —se rió Minerva. Cruzó sus brazos por debajo de sus pechos exuberantes y preguntó—. ¿Y qué hay de los aventureros?
—Tengo una forma de hacer que vengan aquí. Solo necesitamos ocuparnos de los de alto rango. No creo que haya más de dos aventureros de rango B en esta provincia. Ustedes dos pueden encargarse de ellos.
El Caballero Oscuro y el Nigromante asintieron. Ambos estaban bastante confiados en su poder.
—Solo debería haber un obispo y un paladín en la Diócesis de Karsuda ahora.
—Sí —confirmó Ash.
—Iré allí con el guiverno. Ruxa —Jake se dirigió a ella—, ¿tienes alguna forma de contactar a esa 'ama' desde aquí?
La gorgona de ojos verdes negó con la cabeza. Jake chasqueó la lengua. Parecía que tendría que enviar un mensajero hasta Ardin para contactar a esa gorgona. Jake quería reunir tantas fuerzas como fuera posible.