—Mi nombre es Lex —se presentó, ya que iban a trabajar juntos.
—Gisele —respondió ella sucintamente.
Lex solo asintió, y luego se volvió para observar a las interminables pequeñas criaturas que intentaban llegar a ellos.
—Dame un momento —dijo Lex, antes de comenzar a formar una formación. Cómodamente seguro detrás de sus escudos, Lex se tomó su tiempo para construir una matriz fuerte capaz de provocar daño en área.
La falta de presión le permitió explorar con comodidad su repertorio de matrices preestablecidas y elegir la más adecuada.