—Lex, ¿vendrás a la ceremonia de apertura? —preguntó Mary, apareciendo en su sala de meditación. Aunque el hecho de que él estuviera sin camisa la hacía sentirse ligeramente avergonzada, se había encontrado con él admirando sus abdominales suficientes veces como para aprender a ignorarlo ahora.
No era algo que pudiese explicarle. Como alguien que siempre había querido tener abdominales, pero nunca los había logrado, la emoción que sentía cada vez que los veía no era algo que se disipara fácilmente. Además, después de la última serie de 'esculpir el cuerpo', como lo llamaba Lex, realizada por el Lotus, su cuerpo lucía aún más impresionante.
La mayor tragedia era que normalmente él estaría o en forma de Leo o como el Posadero, así que el universo estaba privado de su atractivo.