El servicio de guardería de La Posada de Medianoche, que había existido durante un total de 3 minutos y 21 segundos, cayó bajo el asedio de los guerreros Pavo Real. Montados sobre sus monturas viscosas, saltaron sobre las paredes acolchadas y a prueba de niños, directamente a la zona de niños.
Algunos aterrizaron en el laberinto de setos, lleno de frutas maduras y deliciosas listas para ser recogidas y comidas. Otros que saltaron las paredes aterrizaron en la piscina de bolas, o más bien, en el mar de bolas de plástico de colores. Aún otros aterrizaron en casas hechas enteramente de superficies parecidas a trampolines, mientras que algunos aterrizaron en el gimnasio de la jungla que se alzaba sobre una piscina enorme. Deliciosos dulces estaban escondidos como tesoro en el centro de la jungla a la vista de todos, pero el camino hacia él era peligroso.
