—Entonces... ¿quién quiere probarlo a continuación? —La mirada de Roy barrió a todos y se detuvo en Dalila. —¿Qué tal si lo intentas tú?
De hecho, quería ver si los atributos de fuerza y agilidad de Dalila superarían los 50 si usaba los núcleos para aumentarlos. Así confirmaría que realmente era más especial que los Baldwin. Por eso la incitó a hacerlo.
—No, gracias. —Dalila lo rechazó mientras se alejaba de él y de las repugnantes cosas que tenía en las manos.
Los efectos secundarios de tomar la poción no significaban mucho para los hombres, pero eran traumatizantes para una mujer como ella.
No quería que su aliento oliera a mierda.
No podría soportarlo.
—¡Déjame intentarlo otra vez! —Aydin había saboreado lo que se sentía al aumentar la fuerza con facilidad, y ahora no podía tener suficiente de ella.
Sus pequeñas patas alcanzaron todos los vasos, pero Roy los apartó con un manotazo.
—¿Por qué hiciste eso? —Aydin se frotó la parte trasera de sus manos doloridas.