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Mientras Arkhen absorbía el parásito, Velshi también estaba haciendo el trabajo.
Estos parásitos eran muy únicos, ya que podrían absorber todo de su huésped y finalmente, convertirse en su huésped. Ganarían todo... ¡Y eso también incluía la maldición!
Entonces Velshi planeó permitir que el parásito se comiera la maldición únicamente, mientras mantenía al resto de Arkhen sin afectar. Era difícil... Pero con la esencia de la realidad y las motas de realidad, era posible.
—Tos... tos... —Samira abrió los ojos con algunas toses después de que se le retirara el parásito de la corrupción.
—¡Samira! —Dirroth la abrazó mientras comenzaba a llorar de felicidad. Desde la situación desesperada de aceptar la muerte de su esposa hasta ganar esperanza para curarla y luego ser informado una vez más de que su enfermedad era muy grave e incurable hasta que Arkhen finalmente mostró su milagro y la curó...
