Después de caminar por un minuto, llegaron frente a la puerta del cuarto de Yeezy.
—Querido hermano Arkhen, por favor coloca ese cristal en un lugar adecuado para que pueda mirar, ¿de acuerdo? —dijo Meya con ojos de cachorro.
—Está bien, pequeña pervertida. Pero no esperes que pase algo. Depende —dijo Arkhen mientras le daba un ligero toque en la frente a Meya antes de tocar a la puerta.
Meya rápidamente se alejó después de que Arkhen tocara a la puerta.
Después de varios segundos, Yeezy abrió la puerta. Al ver a Arkhen de pie allí, un toque de rojo apareció, pero rápidamente se compuso y dijo con una sonrisa:
—Pasa.
Al entrar, Arkhen vio una mesa a su izquierda que daba a la cama principal de la habitación a 6 metros de distancia.