—Jamás seré derrotado por este tú —diciendo eso, Lawson lanzó un gigantesco y pesado hacha a Adam. Tal como la gran espada de Adam, el hacha negra gigante pesaba toneladas y Lawson no tenía problema en usar esta pesada arma en el campo de batalla.
Adam sabía que incluso si detenía el ataque con su gran espada, resultaría herido por el impacto, así que se movió hacia la derecha y eligió esquivar el ataque.
—El Adam del pasado no es del tipo que retrocede en una pelea —diciendo eso, Lawson atrajo hacia él su hacha negra. Había una cadena delgada casi invisible atada al mango del hacha. El otro extremo de la cadena estaba enrollado alrededor del brazo izquierdo de Lawson. Agarrando la cadena, él tiró de su hacha hacia atrás.
—El tiempo cambia a las personas. Yo también he cambiado. Habría estado feliz si tú también te hubieras cambiado. Pero mírate. Aún luces igual. Tu personalidad sigue siendo la misma. No has cambiado ni un poco.