¿Qué quiere Korgrak de mí? ¿Y por qué ahora? —El hombre con profundas ojeras bajo sus ojos miró a Kaizen por un momento antes de responder:
—¿De verdad no recuerdas, Kaizen? Vaya. Imagino que has tenido mucho en mente últimamente. Hace unas semanas, en la tienda, hiciste un trato con Korgrak y con nosotros. Prometiste que nos llamarías cuando quisiéramos usar el Orbe del Pacificador para entrar al Jardín Perdido. —Kaizen frunció el ceño, tratando de recordar tal acuerdo, y finalmente lo recordó después de unos momentos.
—¿Cómo pude olvidarlo? —se preguntó Kaizen en voz alta. —Salles casi se ríe. —Bueno, tu desaparición nos tomó por sorpresa. Fuimos a tu antigua tienda, pero había un PNJ cuidándote. Eso preocupó un poco a Korgrak y nos ordenó buscarte, así que ya estamos un poco más tarde de lo debido. De cualquier modo, ¿tienes tiempo libre hoy, verdad? —Kaizen asintió. —Sí, resulta que tengo algo de tiempo libre hoy. ¿Quieres que realicemos esta incursión hoy?