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Después de regresar de su rápida visita al Bosque Brumoso, Kaizen, Ravastine y Jayaa nunca dejaron de salir de la Ciudad Real para evolucionar juntos como equipo.
Las visitas a los campos de caza se volvieron normales, pero obviamente, la princesa siempre llevaba un manto, y solían frecuentar lugares donde muy pocos jugadores iban.
Gradualmente, evolucionaron en su coordinación, aprendieron combinaciones y el líder del trío, Kaizen, recordó la sensación de liderazgo. Habían pasado muchos años desde que la había sentido por última vez.
Cuando no estaba ocupado subiendo de nivel con sus compañeros provisionales, Kaizen estaba en su fragua. Como tomaba un descanso de su desenfrenada exploración del mundo y las misiones, tenía suficiente tiempo para forjar lo que quisiera.