—Está bien, no insistiré más. Con tal de que cuides de mis chicas, estoy satisfecho —Rob sonrió y golpeó a Blake en el hombro.
—Eso está garantizado. Me aseguraré de apreciar a ambas —Blake respondió, haciendo que las caras de ambas chicas se pusieran rojas brillantes.
Blake entró a la base y se dirigió al palacio que Lillia había hecho para él con Erica y Sam siguiéndolo. Cuando entró al palacio, Noa justo pasaba por ahí con Nellie. Al verlo, sus labios se curvaron en una gran sonrisa y corrió hacia Blake y lo abrazó —¡Bienvenido de vuelta!
—Mm... He regresado a casa —Blake sonrió mientras levantaba a Noa del suelo, haciendo que ella chillara.
—¿Dónde están Tina y Lillia? —preguntó Blake.
—Actualmente están preparando una sala para el huevo de Lillia. Por cierto, ¿encontraste lo que buscabas? —Noa preguntó. Pero una vez que vio que Blake negaba con la cabeza, deseó no haberlo preguntado.