—¿Qué crees que esté haciendo Blake? —preguntó Tina mientras ella y Lillia caminaban por un sendero algo despejado entre dos edificios.
—No importa mientras no vuelva con un montón de chicas a su lado. No se da cuenta, pero ahora es mucho más guapo que antes. ¡Es un rompecorazones! —Lillia respondió frunciendo el ceño—. Tengo que estar más atenta a las miradas a nuestro alrededor a partir de ahora.
—Lillia, creo que te preocupas demasiado. Blake ni siquiera me presta atención, incluso cuando me ha visto en ropa interior. Siempre tiene los ojos puestos en ti —dijo Tina con un suspiro de derrota.
—Hmm, ahora que lo mencionas. Pero, ¿a los hombres humanos les gustan las chicas en ropa interior? —preguntó Lillia. Nunca había pensado realmente en eso.
—¡Claro que sí! No sé qué es, pero a los chicos les encantan las chicas en ropa interior sexy —respondió Tina con una afirmación con la cabeza.