Fae y Kane le lanzaron una mirada extraña.
—¿Hm? ¿No están de acuerdo con lo que dije? —Rui levantó una ceja ante su reacción.
—No... —murmuró Kane.
—Estoy de acuerdo, creo que es una perspectiva matizada, pero es algo que escuché de mi abuela, es raro oírlo de alguien sin entrenamiento formal —ella lo miró con un dejo de perplejidad.
—Es solo extraño porque a veces pareces no tener ni idea sobre el Arte Marcial básico, pero al siguiente segundo te conviertes en un experto —Kane se rió incómodamente.
Rui se encogió de hombros. Él, por supuesto, conocía la verdad. A veces parecía no tener idea porque genuinamente no la tenía, el Arte Marcial era muy diferente de las artes marciales en muchos aspectos. Sin embargo, compartían muchos rasgos subyacentes a una escala mayor, lo que hacía que gran parte de su experiencia fuera relevante. Cosas que eran completamente ajenas a la Tierra, como técnicas como la Convergencia Exterior, las desconocía. Pero las ventajas y desventajas generales de estilos y las variables determinantes que decidían el resultado entre dos estilos y enfoques diferentes no cambiaban, aquí era un experto teórico sin igual en estos temas, algo que dudaba que cualquier otro excepto los Maestros y Sabios más experimentados pudiera igualar.
Aún así, no se lo creía demasiado. El hecho era que era ignorante, tenía mucho que aprender antes de poder considerarse un experto en el campo como en su vida anterior. Y eso llevaría mucho tiempo. No es que le importara, el viaje era la mitad del destino. Cada vez que pensaba en su Camino Marcial, se emocionaba desde lo más profundo de su corazón.
—Bueno, mientras lo sepas —Kane se encogió de hombros.
—Por lo que vale, creo que un estilo versátil te convendría más que un estilo hiperespecializado, especialmente debido a tu enfoque ingenioso y táctico. Pero eso significa que tendrás que convertirte en un todoterreno, pero maestro de ninguno —dijo.
—Estoy bien con eso. La mayor versatilidad y flexibilidad valen la pena —respondió Rui. De eso estaba seguro.
Rui a menudo comparaba los deportes de combate con el arte. Había varios paralelismos entre ellos. Un buen cuadro nacía de tres cosas; las herramientas necesarias, la competencia del artista con esas herramientas y la manera en que el artista aplicaba sus herramientas y competencia para pintar la visión que buscaba. Otra analogía que Rui había concebido era la de una cirugía.
Una cirugía perfecta ciertamente necesitaba las herramientas e instrumentos apropiados, así como un cirujano que fuera competente en usar esas herramientas y también; un cirujano que supiera qué operaciones necesitaba realizar para obtener el resultado deseado.
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El combate y el Arte Marcial no eran diferentes, en cierta manera. Las herramientas de un luchador eran las de su cuerpo, sus extremidades, su torso, su cabeza y cada célula de su cuerpo. Cuanto mayor es la calidad de las herramientas, más se puede lograr con ellas. Obtener herramientas de alta calidad era la base del Arte Marcial. Un cuerpo poderoso y capaz era fundamental para el marco del combate tanto en Gaea como en la Tierra. A continuación, la competencia de esas herramientas se correspondía con las técnicas empleadas en combate.
Estas técnicas eran nada más que medios y maneras de operar el cuerpo para cumplir de manera eficiente y efectiva un conjunto de tareas y acciones, esto abarcaba tanto la precisión como la exactitud de los movimientos.
Y por último, la aplicación de las herramientas y técnicas. Usar el movimiento correcto en el momento correcto.
Un aspecto extremadamente importante del combate. ¿Qué importaba si uno poseía el cuerpo de un dios y los movimientos de una máquina si usaba el peor movimiento posible en cualquier momento dado? No importaba, tal persona perdería frente a otra con malas herramientas y técnicas, pero con una gran aplicación.
Actualmente, Rui se acercaba más al último caso. Toda una vida de investigación en análisis y juicio en medio del combate, toda una vida de investigación en la probabilidad de éxito de tácticas aplicadas en varios escenarios con variables cuidadosamente controladas y restringidas.
Esto era algo de inmensa utilidad en Gaea y Rui lo poseía en abundancia.
Por eso era probable que eligiera un Arte Marcial versátil. Eran más versátiles y flexibles en comparación con otros Artes Marciales, su único inconveniente era que eran muy tácticamente intensivos, es decir, de los tres aspectos del combate mencionados anteriormente: herramientas, competencia y aplicación. Los estilos versátiles requerían una calidad de aplicación mucho mayor en comparación con otros estilos.
Por esto, era muy adecuado para Rui, cuya mayor ventaja era su aplicación táctica.
La razón detrás de su decisión ciertamente era una rareza. No había forma de entrenar la aplicación táctica del mismo modo en que se podían entrenar el cuerpo y la técnica. La aplicación táctica era algo que normalmente venía con una vasta cantidad de experiencia, experiencia real. Requería luchar, y más luchar, y aún más luchar.
La calidad de la aplicación de las técnicas de uno era en su mayoría una combinación de inteligencia y experiencia. Por eso Rui era adecuado para ello. Su cerebro todavía estaba desarrollándose, y continuaría haciéndolo hasta la edad de veinticinco años, lo que significaba que su mente se volvería cada vez más aguda con el tiempo. Y aunque le faltaba experiencia práctica, lo que sin duda lo limitaría a corto plazo, sus fundamentos teóricos y conocimientos eran simplemente de otro mundo.
Rui sospechaba que, sea cual fuera su Arte Marcial, probablemente sería diferente a cualquier otro todoterreno en el mundo. Aunque aún no podía extrapolar con precisión cómo sería, exactamente.
—Rui —Julián interrumpió su tren de pensamiento mientras se acercaba al trío. Se había distanciado de ellos cuando se acercaron a Rui, no queriendo formar parte incómodamente de una conversación en la que claramente no tenía cabida. En cambio, les había dado espacio y tomado la libertad de leer el folleto informativo de la Academia que el Departamento de Admisiones había estado proporcionando a los estudiantes y sus guardianes de forma gratuita. Idealmente, querría permitir que Rui pasara tiempo con otros estudiantes todo lo posible, pero
—De verdad deberías leer y aclarar cualquier duda que tengas antes de que sea tarde, Rui, no tendrás otra oportunidad hasta que comience el año académico —dijo.
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