Unos días después, el examen de ingreso al Instituto Místico de Arcana de Magia comenzó oficialmente...
Aethelwolf estaba peinando el cabello de Olivia frente a un espejo. —¿Quieres que te haga una trenza? —preguntó mientras miraba su reflejo en el espejo.
Olivia negó con la cabeza. —No. No quiero atarme el pelo —respondió.
Aethelwolf sonrió y le acarició la cabeza. —Está bien. ¿Has estudiado los apuntes que preparé para ti?
Olivia asintió con entusiasmo. —¡Sí! Aenwyn también me enseñó cómo controlar mi fuerza y hasta aprendí etiqueta noble con ella.
—¿Oh? Parece que se han hecho cercanas. Incluso la llamas por su nombre ahora. Aenwyn es mayor que tú y también es la princesa de un reino élfico, así que tienes que tratarla con respeto, ¿de acuerdo? —dijo Aethelwolf.
Olivia levantó la cabeza y dijo —Papá, Aenwyn me dijo que puedo llamarla por su nombre. Ella dijo que otras personas podrían sospechar si hablamos con ella de manera educada.