—A un lado, la niebla blanca devoraba la niebla verde oscuro —Y por otro lado, torrentes de ataques lanzados por Charley retiraban la niebla verde oscuro.
—William se situó justo frente a la lanza, moviendo las tres colas al mismo tiempo para chocar con su afilada punta.
—William repitió su llamativo movimiento inicial, pero esta vez no solo saltó al aire como solía hacer. Se lanzó hacia adelante para encontrarse con la lanza que se aproximaba.
—Tal movimiento dejaba una sensación muy intensa de dolor y repercusiones en su cuerpo y huesos. Sin embargo, a William no le importaba. Solo le preocupaba que los ataques de Charley no fueran suficientes para derribar la niebla verde oscuro, acabando por corroer sus preciosas armas y perderlas.
—Como temía, parte de las armas empezó a derretirse, convertirse en ceniza y volar por el aire. Pero las partes restantes lograron chocar con la lanza y finalmente detenerla.