—Está bien. Ahora que la transacción comercial ha terminado, hay algo más de lo que debemos ocuparnos —declaró Jack mientras se recostaba en el sofá. Mientras hablaba, finalmente dirigió la mirada hacia la dirección de Alicia.
Wade no se sorprendió de que no hubiera nada más en lo que pudieran transar. Pero en el momento en que Jack habló de ocuparse de algo más, mientras al mismo tiempo miraba a Alicia, no pudo evitar fruncir el ceño ligeramente.
En situaciones normales, si un joven de una familia prominente y con grandes habilidades miraba a su hija, seguramente pensaría en la posibilidad de que los dos estuvieran juntos.
Al final del día, Jack y Alicia tenían la misma edad, y aunque uno de ellos fuera mayor, definitivamente no sería por más de un año. Y además de eso, estaba la reacción que Alicia tuvo en el momento en que Jack se acercó.