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—¿Qué te crees que soy? ¿Piensas que me la pasaré robando los hombres de otras? ¿Por qué iba a hacer eso? ¡Mejor cuida tus palabras, o me ocuparé de ti ahora mismo! —Ella miró a Celine con una expresión de enojo en su rostro mientras preguntaba.
Subconscientemente, debido al enojo que había en su corazón, Silvia desató el aura superhumana. El grupo de guardianes y otros miembros de alto nivel de la organización Panteras que seguían cerca de repente comenzó a temblar.
No era solo debido a la presión que sentían de Silvia, sino también porque ella estaba enfadada. Solo con lo que habían oído acerca de ella, sabían que cuando estaba enojada, entonces las cosas iban a ponerse mal.
Y ahora, mirando al grupo al que se enfrentaba, era obvio que no eran simples. De otro modo, de acuerdo al comportamiento de Silvia, ya habrían sido asesinados.