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Dentro de una sala silenciosa bajo la casa de Anon...
Frank estaba sentado frente a Anon.
—Entonces, ¿de qué quieres hablar? —preguntó Anon.
—Quiero que me ayudes a matar a mi padre.
—Hmm... ¿Y por qué debería? —preguntó Anon con un tono muy calmo y estable porque conocía el procedimiento de selección del próximo líder de la familia en la familia de Frank.
—Bueno... puedo darte dinero.
—Nah... tengo demasiado —dijo Anon mientras convocaba una moneda de platino en su mano y la rompía con sus dos dedos.
'Vaya... eso es una riqueza sucia para aplastar un platino al instante.' Frank pensó para sí mismo mientras miraba a Anon con sorpresa.
—¿Siguiente...?
—Bueno, no creo que haya algo que pueda conseguirte y no se pueda comprar con dinero. ¿Así que pide, qué quieres?
—¿Qué hay de tu madre? —dijo Anon mientras cruzaba sus brazos y se reclinaba hacia atrás en la silla para descansar la espalda.
—¿Qué hay de mi madre? —preguntó Frank con expresión confusa.