Todos miran a Anon con expresiones de shock y sorpresa.
—¿Acaba de decir eso?
—Sí, dijo... "No me arrodillaré".
—¿Cómo se atreve a decir eso a nuestra Reina?
—¿Qué audacia?
...
Todos en la Corte Real comenzaron a hablar de esto mientras señalaban hacia Anon.
—¿Qué has dicho? —El Anunciante que estaba al lado de la Reina preguntó con expresión seria.
—No me arrodillaré —Anon se repitió sin ninguna vacilación.
—Lo siento, Sis... Tu compañero está a punto de morir y no puedo hacer nada al respecto —Guki habló mientras miraba al suelo con una expresión decepcionada.
«Maestro, ¿qué estás haciendo? Por favor, arrodíllate o morirás y si él muere, mis encantamientos de esclavo serán revelados frente a todos» —Kolis pensó mientras miraba a Anon con una expresión preocupada.
—Guardias, háganlo arrodillarse frente a la Reina y después córtenle las piernas —El General ordenó con una expresión neutra en su rostro.
