—Entonces, ¿estás diciendo... Él morirá pero renacerá desde el vientre de su propia hermana? —preguntó Anon con expresión de sorpresa.
—Sí... Ese es el plan —respondió Damon.
—Espera, espera, espera... Primero, dime una cosa. ¿Cómo puedes escuchar su conversación desde aquí? —preguntó Anon.
—Oh, es un dispositivo que creé... Como conozco la firma de maná de mi hermana... Metí una pequeña parte de mi maná en su firma de maná y logré que funcionara hoy. Pero, no puedo hacer nada más que escucharlos hablar. Si intentara hacer algo, ella se enteraría de esto inmediatamente —habló Damon.
—Ok, entonces... ¿Qué hacemos ahora? ¿Qué deberíamos hacer? ¿Cómo detenemos a tus hermanos y hermanas? —preguntó Anon con expresión confundida.
—Bueno, es tu mala suerte que no puedas detenerlos de venir aquí y es tu buena suerte que ninguno de ellos haya tenido esta idea hasta ahora —respondió Damon.
—¿Qué tal el Juego de Re-Nacimiento? —de repente habló uno de los dioses.