Anon se volteó y preparó su cuerpo para sumergirse en el mar una vez más.
—Maestro... —de repente, la voz de Mike resonó desde atrás.
—¿Sí...? —preguntó Anon girándose.
—Maestro... Hay algo que Kole dijo cuando me contó sobre este hombre. —Mike habló con una expresión tensa y seria.
—¿Qué? —preguntó Anon con una expresión curiosa.
—Dijo: "Tienes que matarlo rápido o será un dolor de cabeza en unos meses". —Habló Mike.
—¿Por qué diría Kole eso? —preguntó Anon.
—No sé, dijo que tuvo una visión de algún tipo. No creo que pueda ver el futuro, pero pensé que lo mejor que puedo hacer es informarte. —respondió Mike.
—Está bien, me ocuparé de él después de esto... —habló Anon con una expresión seria.
—Sí y hay una cosa más, maestro. Aquí, esto es algo que la señora Sephie hizo para ti, cuando se enteró de que ibas a sumergirte. —Mike habló mientras le entregaba a Anon una pequeña caja de madera, que tenía un pequeño triángulo encima.
