—Terminemos con esto, ¿de acuerdo? —preguntó Anon mientras apartaba su cigarro y se acercaba a Keat con una sonrisa en el rostro.
—T-Tú quédate... lejos de mí. Bala de Vien— Antes de que Keat pudiera lanzar el hechizo, Anon lo interrumpió.
—No funcionará; no malgastes tu maná. Tus esfuerzos son inútiles, chico. —Anon habló mientras ponía su mano sobre el hombro derecho de Keat.
En ese mismo momento, Keat se dio cuenta de que cada palabra que salía de la boca de Anon es cierta. Keat se dio cuenta de que Anon es alguien a quien no puede matar.
—P-Por favor, yo no quería ofenderte. P-Por favor déjame ir, y te daré tanto dinero que— Antes de que Keat pudiera terminar su frase, Anon aplicó un poco de presión sobre su hombro y lo derribó de rodillas.
Thud
—L-Lo siento, señor... No sabía que eras tú. Me disculpo contigo de todo corazón, por favor señor... Te ruego, perdona mi vida. —Keat suplicó mientras agarraba la pierna de Anon, y su cuerpo empezó a temblar.