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—Anhhh~ me estoy viniendo... el maestro va a ver cómo me vengo sí sí... lamelo más maestro —Gia gritó en total calentura.
—*Lamido-Lamido*
—Anon le lamió el clítoris como un lobo salvaje bebiendo agua de un lago.
—Maestro yo también me estoy viniendo... por favor, llene de semen a esta esclava inútil y pinte las paredes de mi útero con su dolor de fabricación de bebés —Freya dijo frenética.
—E-Eh, estoy aquí también... para que lo sepas —Kia dijo con cara de tímida mientras se tocaba rápidamente como una perra en celo.
—Conforme Anon se acercaba al clímax, apretó los pechos de Freya con fuerza y mordió el clítoris de Gia que además tenía sabor a vino.
—Anhhhh~
—Yeessssss... Viniéndose. Me están llenando de semen —Freya gritó al desmayarse y caer al suelo con una cara de ahegao.
—Maestro algo se está viniendo... oh no no no... estoy orinando... maestro por favor perdone a esta esclava. Me voy a venir y a orinar al mismo tiempo.
—De repente líquidos brotaron de su vagina como un tanque roto.
—La lengua de Gia se asomó por su boca y sus ojos se cerraron a la mitad mientras hacía el signo de paz con ambas manos y eyaculaba un montón.
—Gia también se desmayó debido al inmenso placer.
—Anon todavía estaba lleno de vigor y al ver que su hermanito seguía de pie sin señales de calmarse, Kia se giró hacia la cama e inclinada hacia abajo abrió los labios de su coño con sus propios dos dedos para que el pene de Anon entrara.
—Como si sus instintos femeninos se apoderaran de ella y controlaran su cuerpo para complacer al macho que la estaba mirando con ojos de depredador.
—Anon vio esto y sin pensarlo más embistió su pene en el coño de Kia sin pensarlo dos veces.
—Anhhhhh~ es tan grande.
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*Palmada*Palmada*
—Shhh~ mhnnnmm~ sí sí házmelo más fuerte, mucho más fuerte.
Escuchando esto Anon agarró las ultra enormes ubres de Kia que se balanceaban locamente con cada embestida y agarró sus pezones mientras los frotaba juntos.
—Annnhhhhh... no mis pechos y mi coño al mismo tiempo.
Tan pronto escuchó esas palabras Anon frotó sus pezones más rápidamente y rígidamente mientras comenzaba a empujar su pene en el coño de Kia más rápido que el pistón del motor de un coche.
—Annnhhhhhhhhhhhhh~ no... vas a romper mi coñ— antes de que pudiera decir algo Anon la besó tan fuerte que incluso olvidó que su coño estaba a punto de romperse un momento antes.
*Palmada*Palmada*Palmada*Palmada*
La velocidad siguió aumentando y la consciencia de Kia huyó de su cuerpo debido al intenso placer.
Finalmente el pene de Anon entró en el útero de Kia y vertió su semilla dentro de su sala de fabricación de bebés llenándola hasta el borde.
Kia también se desmayó en la cama y mientras el semen empezaba a brotar de su coño inconsciente Anon habló.
—Qué desperdicio... debería taparlo.
Sacando un dildoctopus de su inventario Anon lo embistió en su coño sin ninguna misericordia y detuvo el flujo innecesario de semen de su coño.
—Ahora pasemos al plato principal —dijo Anon mientras miraba el cuerpo de Amanda.
—Hiiiieeee... aléjate de mí pervertido —dijo Amanda con una mirada asustada pero la verdad era que su coño también estaba goteando mojado por la escena que acababa de suceder.
Anon se acercó y agarró los pechos de Amanda mientras comenzaba a frotarle los pezones.
—Anhh...mnhm~ no hagas esto. Se siente demasiado bien.
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Anon agarró su trasero de tamaño mediano y comenzó a manosearlo.
Hace tiempo que su cuerpo estaba caliente y mojado debido a su tacto.
Esta vez antes de insertar su pene en el coño de Amanda, Anon alcanzó el cuerpo inconsciente de Freya y agarró su cabeza mientras usaba su boca para lubricar su pene.
Después de lubricarlo, regresó a Amanda.
Como Amanda estaba sentada en la mesa, Anon simplemente la levantó en sus manos como a una muñeca.
—E-E-Eh ¿qué estás haciendo? Tú pervertido...estúpido no anhhhh~ —e insertó su pene dentro de ella sin previo aviso.
A medida que el pene de Anon entraba en su coño, Amanda perdió todos sus otros sentidos y solo una idea le vino a la mente y esa era ser follada por este hombre y alcanzar el máximo placer como los demás.
—Anhhh~ ¿por qué es tan grande?
—Dios lo ha querido.
Amanda giró su cuello y besó a Anon en los labios mientras le daba un buen masaje a su lengua con la suya.
Ambos se besaron mientras Anon seguía golpeando su vagina.
*Mnhhhmmm* sonidos trataban de escapar de la boca de Amanda pero se detuvieron cuando Anon atrapó su lengua con sus labios.
*Mnhhhm.*
*Palmada* *Palmada*
Cuando Anon estaba cerca de venirse dio un último gran empujón y dejó el cuerpo de Amanda suspendido en el aire para caer libremente.
—Eh? —Amanda dijo confundida pero de repente sintió que el pene de Anon la había penetrado hasta su parte más profunda tocando la pared trasera de su útero con la punta de su pene.
...y antes de mucho tiempo sus expresiones faciales cambiaron a las de una puta con la mente rota mientras Anon soltaba su leche en su útero mientras ella colgaba de su pene.
—Annhhhhhhhhhhh~ me estoy viniendoeeee~ fuerteeee.
Anon notó que su nuevo juguete se había roto y le rompió el cuello resultando en su muerte.
*Crack*
—Hick...? —Este fue el último sonido que escapó de la boca de Amanda.
—¿Pensaste que podrías ser una de mis chicas...? Solo fuiste un cabo suelto desde el principio. Incluso si te hubiera hecho olvidar todo sobre mí, aún estabas destinada a morir por alguien más, solo agradéceme que te di placer antes de darte una muerte sin dolor. —Anon miró el cuerpo muerto de Amanda sin ninguna expresión de tristeza o culpa mientras se vestía.
—Oi... ¿aún no se han capturado a los intrusos? —Anon dijo en un tono serio.
De repente cuatro figuras largas vestidas completamente de negro como un ninja aparecieron desde los rincones oscuros de las habitaciones y se inclinaron.
—Maestro, los tres han sido capturados con éxito y lo esperan en la sala de entrenamiento. —Uno de ellos habló.
Ellos son mi ejército asesino privado de ogros entrenados personalmente por la anterior reina del reino elfo y la mejor asesina del mundo, Diana Olives.
Le prometí que sería la reina del Reino elfo otra vez dentro de 1 año desde el día en que la compré a cambio de enseñar a mis ogros actividades como pelear y asesinar.
Usando el túnel subterráneo, todos los ogros del bosque de las pesadillas llegaron a la sala de entrenamiento y ahora tengo alrededor de 10 a 15 mil ogros en mi sótano listos para matar o morir a mi mando.
—Limpia el cadáver y lleva a las chicas de vuelta a sus habitaciones. —Anon dijo mientras miraba a Amanda muerta.
—Como ordene maestro. —En 10 segundos la habitación se vació como si no hubiera nadie allí excepto Anon, las cuatro figuras se desvanecieron nuevamente en la oscuridad de la habitación.
—Ahora hablemos con nuestros dulces invitados. —Anon entró en el sótano.
[Lección del día: No dejes cabos sueltos, incluso si es un coño de un solo uso. Se un hombre de cultura, no seas un maldito.]