—Señoras y señores, como pueden ver, el señor Jule es el primero en escupir sangre... ¿podría ser esta una señal de que el señor Jeffery ha ganado? —anunció el comentarista.
—¡Vamos, chico Jeffery! ¡Termínalo con el próximo ataque! —gritó Xander mientras se levantaba de su silla emocionado.
Anon llevaba una sonrisa psicopática mientras miraba a Jeffery, enviándole escalofríos por la espina dorsal, dejándolo inmóvil.
—No puedo moverme... las partes de mi cuerpo se sienten como hielo congelado. ¿Qué debo hacer? Me está mirando como un cazador observaría a su presa, ¿qué va a hacer a continuación? No sé nada de él. ¿Está preparando su hechizo? —pensó Jeffery sintiendo como se le paralizaba el corazón.
La sed de sangre de Anon aumentó cuando vio su propia sangre, despertando una ferocidad primigenia dentro de él. Todo el reino sintió su sed de sangre, incluso Ion la sintió.