—Quiero salir contigo —Anon habló mientras sonreía hacia Fe.
—¿Eh? —Fe se quedó con una cara de shock tras escuchar el deseo de Anon.
—Sí, quiero salir contigo —Anon repitió de nuevo.
—Ehmm... Cof... No creo que estés hablando en serio, señor Jule. Lo que pides es absurdo, no se puede hacer —Fe habló con una expresión ligeramente enojada.
—Lo que he pedido no es dinero ni placer sexual. Simplemente pedí unas horas de tu valioso tiempo. No creo que eso sea algo que no puedas darme... ¿o sí? —Anon preguntó con una sonrisa en su rostro.
—Sí, sé eso, pero no puedo hacerlo porque soy una soldado, y tengo que proteger el reino. No puedo salir con un chico, y ni siquiera tienes mi edad. Pide otra cosa... como una espada o un escudo. Incluso puedes pedir hechizos ocultos para aumentar tu poder —Fe respondió, y sus mejillas empezaron a enrojecerse.